viernes, 26 de agosto de 2011

QUE NO SE TE OLVIDE...


  • Permitirte estar y ser quien eres, que nadie te diga donde debes estar y quien debes ser.
  • Aceptar lo que sientes aunque otros sientan algo distinto si estuvieran en tu lugar.
  • Pensar lo que piensas y decirlo si lo crees adecuado o callártelo si te conviene; porque nadie puede dirigir tu mente mejor que tú, y tampoco pueden obligarte a exponerlo o callarlo.
  • Arriesgar,aceptar las ganancias y responsabilizarte  de las pérdidas. Solo tu puedes disfrutar de lo que consigues y reparar lo que dañas.
  • Investigar, buscar y encontrar lo que crees que necesitas del mundo; no esperes a que alguien lo consiga por ti, pues posiblemente no te satisfaga.
 
...SER QUIEN ERES.

sábado, 20 de agosto de 2011

LA QUEJA, UN MAL HÁBITO


	La queja es un mal hábito al que muchos de nuestros pacientes se han acostumbrado. El paciente espera que con la queja el problema se resuelva, pero ¿como va a solucionarse algo con tan solo esperar? quedándote inmóvil y llenando tu vida de quejas lo único que consigues es anclarte en la frustración, el descontento, el resentimiento y la resignación. Lo que obtiene el quejoso es una vida de insatisfacción permanente y negatividad; se introduce así en una espiral  sin salida donde “me siento mal y me quejo; me quejo y me siento mal”. No hay aceptación y por tanto, no hay posibilidad de cambio ya que uno mismo la esta bloqueando.

	Hay que descubrir esta trampa para no caer en ella, hay que ser consciente de que a uno se le van a presentar numerosas dificultades y situaciones no elegidas;  si utilizas como estrategia la queja las mantendrás y las alimentaras, justo lo contrario de lo que  esperas. Además, otros inconvenientes de la queja es que con ella pierdes tiempo para invertir en tu bienestar y energía para poder disfrutarlo. 

	Tu puedes elegir quejarte o elegir no quejarte ¿que resultado quieres? 

	Hagamos un análisis en lugar de una queja, que sirva como salida hacia la satisfacción, comencemos el camino, disfrutemos de sus diferentes paisajes y avancemos por  las “trampas” que son  las piedras que pueden detener nuestro rumbo.
 
 
 

viernes, 12 de agosto de 2011

MI AMIGO: EL MIEDO


     Nos han acostumbrado a ocultar ciertas emociones, las negativas, porque sentirlas diría algo malo de nosotros; si tenemos MIEDO somos unos cobardes. ¿Quien quiere ser cobarde? Nadie, pero yo si quiero sentir miedo porque el Miedo me va a alertar, me va a hacer reaccionar con gran rapidez si estoy en peligro. Por ello, el miedo es una emoción amiga. Me protege y me cuida; el miedo no me hace ser cobarde, me hace sentirme valiente porque me ayuda a estar en contacto con la realidad.

     Su función es protectora, hace que yo me cuide;
como tengo miedo a enfermar cuido de mi salud... En lo emocional, la función protectora, es más complicada porque cuando tenemos miedo a sentir rabia, miedo a que nos rechacen, miedo a amar,...en lugar de reconocerlo, lo negamos: esto si es ser cobarde. Creemos de esta manera que nos protegemos, pero en realidad lo que nos estamos provocando es más dolor y sufrimiento. Estamos alterando su cometido y al mismo tiempo también estamos alterando la verdadera función de las otras emociones por no querer sentirlas. Pasamos de tener un amigo a tener un enemigo, nos desvinculamos de la realidad huyendo, atacando o quedándonos paralizados. Si el miedo es nuestro enemigo, su función ya no es protectora sino que es destructiva; rechazamos y en lugar de protegernos de lo que no queremos que ocurra, lo atraemos y ocurre; por ejemplo, si tenemos miedo a fracasar el miedo enemigo nos boicotea y no conseguimos éxito, si tenemos miedo a la soledad nos aislamos de los demás y me quedo solo...

     Aceptemos el Miedo como amigo, demosle su lugar, convivamos con él y dejemos que cumpla con su trabajo. Haz del miedo un buen amigo.

viernes, 5 de agosto de 2011

EL TODO ES MÁS QUE LA SUMA DE LAS PARTES

Continuamente buscamos ajustarnos al exterior y a lo que los demás nos piden; mostramos lo que conviene y ocultamos aquello que nos avergüenza: nuestros defectos. ¿Por qué nos tratamos como una mercancía que hay que vender? Uno de los motivos principales es el miedo: miedo a no ser lo sufiente y miedo a no tener lo suficiente, pero lo suficiente ¿para quien?Nos olvidamos de que el otro, mi igual; se equivoca, tiene defectos, tiene miedos, comete errores...no es perfecto y esto le iguala a lo que yo tambien soy: imperfecto.
Queremos gustar sin duda; pero el objetivo del cambio no tiene que ser la aprobación del otro sino que uno tiene que cambiar o modificar un comportamiento si es él mismo la razón de cambio.
Somos especiales y validos por ser como somos; los defectos no nos restan valor y las virtudes tampoco suman; sencillamente son. Y como son y nos hacen ser, somos validos. No se trata de juzgar un defecto y premiar una virtud; se trata de valorar que somos lo que somos en su conjunto. El Todo es más que la suma de las partes. Formamos un conjunto único y por tanto de incontable valor. Mirate y dime ¿cuánto vales?

martes, 2 de agosto de 2011

¿COMPLEMENTARIEDAD O SEMEJANZA? QUÉ NOS LLEVA A ELEGIR A UNA PAREJA Y NO OTRA.


Sera su forma de hablar, de vestir, su físico,...este es el primer error; la elección de pareja depende más de nuestros rasgos de personalidad y circunstancias, nosotros somos quienes decidimos si abrimos la puerta a enamorarnos o no, independientemente de nuestro exterior.
¿Que buscamos en la pareja? Hay quien busca Complementariedad y esto es presuponer que uno esta incompleto o a falta de algo, aunque no sea
consciente de ello. Es decir, hay una vulnerabilidad a la dependencia, a la falta de autoestima y beneficia la construcción de un vínculo insano. Se esta eligiendo desde el inconsciente porque no se es consciente de los verdaderos motivos por los cuales se elige pareja.
Elegimos también desde el inconsciente, cuando repetimos patrones de relaciones pasadas con la creencia de que ahora será diferente y lo único que es distinto es el envoltorio. Revivimos el pasado con otro rostro diferente.
Por su contra, esta quien busca la semejanza; existe el mito de que lo parecido puede aburrirnos pues se piensa erróneamente que no nos puede aportar nada. Sin embargo, elegir una pareja semejante ayuda al autoconocimiento y autocrecimiento personal. La clave esta en equilibrar lo semejante y lo diferente; compartir y ser semejantes en cuanto al estilo y definición de amor posibilita y augura la satisfacción marital. Si somos semejantes en los cimientos de una relación de pareja se disminuye la agresividad, la inseguridad y facilitamos la construcción de un vinculo seguro.  Sin duda la pareja es para ser feliz, no para estar en guerra continua luchando por la razón o el poder.
            El secreto esta en tener una base semejante y un equilibrio en cuanto a la intensidad de lo  diferente.

lunes, 1 de agosto de 2011

¿POR QUE ES TAN DIFICIL CAMBIAR?


Cambiar: esta suele ser la primera demanda y objetivo que nos piden nuestros pacientes cuando entran en consulta. Lo que se esconde detrás es el miedo, miedo a sufrir y seguir sufriendo.
Sin embargo, lo primero que hay que modificar es esta expectativa incoherente con lo que significa ser humano. Cambiar no significa dejar de sufrir. El sufrimiento es parte de la vida; por lo tanto, hay que aceptarlo y convivir con el. Este es el verdadero cambio que hay que plantearse.
Por este motivo es tan difícil cambiar; porque lógicamente nadie quiere sufrir y aceptar el sufrimiento es algo que en un primer momento puede resultar contradictorio. Pero no aceptarlo es ir en contra de nuestra naturaleza humana, hay que comprender desde nuestros limites que es aquello que realmente podemos modificar y sin ninguna duda no podemos dejar de sufrir. Lo que si que podemos hacer es aprender a afrontar, aprender a no contribuir  y seguir generando mayor sufrimiento del que nos toca vivir. Para ello contamos con la lógica, otra condición natural que nos hace humanos; el antídoto frente al sufrimiento inútil. Nuestra inteligencia nos hace crecer, avanzar, progresar, nos hace ir en busca de la felicidad mientras que nuestros miedos nos paralizan, nos inmovilizan y siguen manteniendo el sufrimiento inútil.
Ser conscientes de lo que nos hace humanos es el primer paso al cambio.